Los halls, pasillos y corredores son esos espacios de transición que en general, se decoran con poco o directamente no se decoran. Sin embargo cuando nos tomamos con alguno con personalidad por su diseño o decoración, nos gusta y queremos copiarlo.
En este libro de ideas te vamos a dar ideas para aprovechar esos espacios olvidados y volverlos partes fundamentales de la casa.
Estanterías, sencillas o más importantes, que nos sirven de apoyo o para ubicar esos objetos que decoran, alegrando el lugar, es una de las ideas básicas para pasillos y corredores.
Fotos propias que recuerdan buenos momentos o de fotógrafos profesionales que aportan arte al ambiente quedan de maravillas si además les sumamos encantadoras lucesitas como estas.
Pueden ser mesitas de apoyo, alguna silla o banquito pequeño. Eso bastará para decorar ese espacio transicional.
Paredes y techos blancos pueden resaltarse con colores alegres en cuadros, elementos y detalles.
Un pasillo de entrada revestido en ladrillo y con impronta industrial suma elementos cancheros y descontracturado: una bicicleta colgada, un skate y un perchero de Gutman + Lehrer Arquitectas con mucha onda.
El detalle a veces no está en las paredes ni el el techo sino en el piso. Una buena forma de dividir ambientes también.
La clásica biblioteca, perfecta para grandes lectores con un pasillo largo y aburrido.
Decorar con luces no es ninguna idea original salvo que lo hagas con artefactos como los de esta foto. Apliques de luces que encandilan por su original diseño.
Un pasillo indiferente, monótono o deslucido puede transformarse en un edén lleno de color gracias a la frescura de plantas y flores.
Si te gustan las flores, no te pierdas este otro libro de ideas.
Una idea sencilla y al alcance de todos: algunos litros de pintura de un color vibrante y energético, como el de esta foto, transforma por completo tu antiguo y blanco pasillo.