7 ideas para crear una cocina comedor pequeña

Una muy buena idea para ganar amplitud en espacios reducidos es confinar la cocina en una esquina. Esta disposición logra aprovechar las paredes y deja el centro del espacio para que otros muebles puedan usarlo. Para conseguir una mejor iluminación y sensación de amplitud se recomiendan los muebles y gabinetes en tonos claros.

Los muebles modulares son una opción muy estética para una pequeña cocina comedor. Gracias a que los muebles se encuentran ocultos en los gabinetes, dan la sensación de una mayor amplitud espacial. Se pueden generar integraciones interesantes con otros muebles y espacios gracias a la paleta de colores.

El incluir una mesa de trabajo como una barra de apoyo para la cocina es una idea que además de práctica es muy funcional. Se pueden incluir algunos bancos para que sirva como una pequeña mesa. Al no estar fija, puede desplazarse para originar un comedor para desayunar o una comida informal.

Para las viviendas con entresuelos lo mejor es colocar la cocina debajo del nivel adicional. Es un lugar que se adapta perfecto a las medidas convencionales de los muebles de cocina ya que suelen ser espacios de poca altura. Se suelen colocar barras de apoyo para delimitar el espacio y aumentar el uso de la misma.

Las barras de servicio son la mejor manera de potenciar el uso de una pequeña cocina. No sólo son muebles que dan apoyo para la preparación de alimentos: son extensiones de la cocina en donde se puede comer y sirven de lugar de transición entre la propia cocina y el comedor. Por sus dimensiones se pueden incluir sillas altas o bancos. La manera de integrar estos elementos se puede hacer a través del color o de los materiales.

Para áreas informales se puede optar por las cocinas modulares en barra. Estas suelen ser compactas debido a que están diseñadas para ocupar sólo un muro del lugar en donde se colocan y es por ello que contienen todo lo necesario en cuanto a preparación y guardado. Para integrarlas al espacio del comedor se puede optar por una barra o una mesa pequeña.

Los colores claros siempre favorecen a los espacios pequeños. Tener tanto los muros, así como el cielo raso y los muebles en blanco es una gran idea para cocinas pequeñas. Gracias a ello la luz encuentra mayor rebote, produciendo una sensación de un espacio más grande. Para que el efecto se intensifique se puede usar luz blanca: es el único espacio en una vivienda que requiere este tipo de iluminación.

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