El azul es un color frío por excelencia, es por ello que genera un clima de frescura en el ambiente donde sea utilizado. Además, crea la sensación de mayor tamaño a las habitaciones. Los efectos pueden ser contraproducentes, por lo que al decorar con tonalidades azules deben utilizarse siempre combinadas con otros colores, especialmente el blanco.
Por otra parte, y como todos los colores, genera sensaciones en el ambiente donde se utiliza. Según la psicología del color, pintando las paredes en estos tonos, se crea un espacio calmo, que incentiva a la concentración y motiva a la tranquilidad.
Si buscamos un color tranquilo o pasivo dentro de la amplia gama de colores existente, las tonalidades azules son la opción indicada. Cualidad que puede ser aprovechada en una habitación o cualquier ambiente donde se desee crear un clima de tranquilidad y paz.
El azul, es más que un color, es una gran familia que va desde las suaves hasta las más oscuras, pasando por tonalidades medias y agrisadas. Dentro de los colores azules podemos encontrar al turquesa, cobalto, celeste, hielo o azul navy, etc. Toda esta gama de colores hace que podamos adaptar al más indicado al ambiente que deseemos, de acuerdo a la iluminación existente, el tamaño de la estancia y los gustos personales.
Si deseas una cocina elegante y fresca es una opción, aunque el azul no es un común en estos ambientes, solo se limita al color de los muebles y hasta pintar solo una pared. Hay que destacar que usarlo en la cocina y el comedor disminuye el apetito, una cuestión a favor o en contra, dependiendo la situación.
Es el color indicado si deseas crear una sensación de tranquilidad y sosiego, especial para un momento de descanso de una familia con una vida inquieta y de trabajo. Para darle un toque cálido y alegre es común combinarlo con blancos, verde manzana, mostaza, purpura, malva, canela o naranja.
El baño suele ser un lugar frío, y utilizar una tonalidad que aumente la sensación puede ser arriesgado. Sí es óptima para algunos detalles si te agrada decorar el baño, que junto con el blanco y el verde crean una sensación de limpieza y frescura.
Un dormitorio azul puede ser muy tranquilo y propiciar al descanso, pero si el ambiente es frío y posee poca iluminación no es una tonalidad recomendada, por eso siempre es recomendable combinarlos con otros tonos para hacer de un ambiente perfecto.
Es perfecto para un lugar donde se necesita concentración y, dentro de lo posible, evitar el estrés, aunque el mismo efecto lo podrían lograr los colores neutros. El azul también refleja seriedad y es símbolo de confianza y profesionalismo.
Para los niños es un color común, pero puede crear un clima demasiado deprimido. Lo mejor en el cuarto de los niños es combinarlo con otros colores para avivar el ambiente y motivar al juego, como por ejemplo con amarillo, verde, e inclusive rojo y blanco.
El blanco es el compañero indiscutible de cualquier color que se utilice para pintar las paredes, y el celeste no es la excepción, por el contrario, es una de las combinaciones más comunes para crear espacios luminosos.
También es perfecto junto a otros colores azules más oscuros e intensos, lo que se conoce como un esquema de colores monocromático. Ya sea para los complementos como para los detalles el azul puede ser también un protagonista.
Este color es recomendado para estudios, dormitorios y salones, aunque ninguna estancia queda exenta. Usualmente debe ser acompañado con otros colores para no crear un ambiente demasiado monótono y oscuro. El blanco aporta la iluminación absorbida por el color azul y produce un marcado contraste, es el compañero ideal. Otras combinaciones se pueden dar con beige y cremas con lo que se adquiere un poco más de calidez en el ambiente. Por otra parte, los tonos grises crean un clima ultra moderno, y el contraste es perfecto y más que elegante.
Utilizando este tono de azul marino podrás evocar los increíbles tonos del océano. Se trata de un color ideal para los detalles en blanco para crear espacios puros, limpios y bastante amplios.
El azul celeste en tono añejado que brinda mucha calma y armonía a tu hogar. Es por este motivo, que resulta perfecto para pintar los dormitorios o cualquier espacio de tu hogar donde desees generar un ambiente tranquilo.
Si no te basta con un solo color para generar el impacto que buscas, puedes optar por utilizar varios tonos del mismo. Es perfecto para utilizar en diferentes patrones, por ejemplo, puedes pintar los frisos, molduras y otros acabados en un tono de azul que no sea el mismo de la pared. Otra buena opción son los cuadros en otro tono de azul para poner sobre la pared y de este modo generar un interesante juego decorativo. Las distintas tonalidades de azul consiguen integrarse a la perfección con madera oscura y los detalles en bronce. No debemos olvidarnos de la clásica y atemporal combinación con blanco. Se trata de una mezcla que va de maravillas en cualquier espacio.
Si optamos por pintar la habitación de azul claro debemos tratar de no romper la armonía arrojando colores con mucho contraste ni intensos, pues, aunque nos guste o quede bien, rompería el flujo armónico que transmite el azul.
La combinación de azul con amarillo. Si quieres usar un azul oscuro en la pared, te recomendamos que pintes solo una, dejando las demás en blanco o usar un color neutro, ya que de esta forma no perderás en luminosidad. Como puedes ver el amarillo queda genial combinado con el azul.
El color gris es un color neutro que combina prácticamente con cualquier color, por lo que es una buena elección si buscas colores que combinan con el azul, en este caso, además, el azul oscuro y el gris Oxford tienen cierta similitud, por lo que puedes crear ambientes muy armónicos.
El color azul es perfecto para combinar casi con cualquier color, dándole la sensación de creatividad y haciendo salones divertidos, atrévete a combinarlo, sin duda el resultado será de diez.
Usa un azul pastel, puro, que evoca una bahía de suaves brisas y tiene un matiz azul crepuscular. Es el color perfecto para un dormitorio. Combínelo con tonos claros de coral y rosa para crear una apariencia armónica.
Al usar la combinación de azul con el marrón, sobre todo si usas un marrón oscuro lograras un resultado muy sobrio y elegante, al ver el resultado de combinar el azul con marrón, sin duda queda genial en cualquier lugar.
Al usar un azul rey lograras una combinación bastante psicodélica, puede que no todos se atrevan, pero el resultado es bastante divertido como para un estudio, sin duda te dará un aire de pura energía.